Estamos indignados por la decisión de ayer de la EPA de posponer la implementación de las Normas de Protección a los Trabajadores y así poner en riesgo la vida de los trabajadores agrícolas. Con esta decisión, más de 2.7 millones de trabajadores agrícolas, incluidos 500,000 niños, serán puestos en peligro con reglas anticuadas que dejan a los trabajadores agrícolas de nuestra nación menos protegidos de los productos químicos tóxicos que cualquier trabajador en cualquier otro sector industrial. La indeferencia de la EPA por las vidas de los trabajadores agrícolas pone a los niños en riesgo de manejar pesticidas dañinos, niega el acceso de los trabajadores a la información sobre los productos químicos a los que están expuestos y no les da capacitación adecuada de seguridad y no protege a los trabajadores si hablan sobre el uso indebido de pesticidas y a la exposición.
“No podemos ir hacia atrás ... Ganaremos. Estamos ganando porque la nuestra es una revolución de la mente y del corazón...”