16 de junio, 1998
Salinas, Segunda Ciudad de la Costa Central que apoya a la UFW
Con una votación de 4 en favor y 2 en contra, el Consejo de la Ciudad de Salinas aprovó la resolución -elaborada por los campesinos de la fresa de una de las más grandes compañías productoras de fresa del área- por medio de la cual dan su apoyo a la Unión de Campesinos de América en sus esfuerzos por organizar a los trabajadores agrícolas de la fresa.
Mas de cien campesinos de la fresa y sus simpatizantes presenciaron cuando el Consejo de la Ciudad estableció la resolución "apoyando el derecho de los trabajadores agrícolas de la fresa a organizarse para obtener un nivel de vida mejor" Esta medida también dió su respaldo a la filial de la Costa Central de la Comision Nacional de la Fresa de los Derechos de los Trabajadores (NSCWR).
Recientemente, la ciudad de Santa Cruz también brindó su apoyo a la Unión de Campesinos en su campaña por mejorar las vidas de los campesinos de la fresa y unirse a la NSCWR, la cual se fundó en 1996 para respaldar el derecho de los trabajadores de la fresa para organizarse. La filial de la Costa Central representa una gran variedad de organizaciones comunitarias e individuos.
La resolución fué propuesta por los campesinos del Rancho de Salinas Berry, el cual es parte del gigante corporativo de fresa, Driscoll. La aceptación de esta medida es muy mportante pues, desde el inicio de la campaña de organización para ayudar a los campesinos de la fresa de la Unión de Campesinos, se originó una huelga en Agosto de 1995.de 450 trabajadores del Rancho VCNM, otra firma muy importante de fresas en el área de Salinas.
Después que los campesinos del rancho VCNM votaron 332-50 por la representación sindical de la Unión de Campesinos, durante una elección vigilada por las autoridades del estado y por voto secreto, la compañía enterró una parte de su cosecha de fresas. La Junta de Relaciones Laborales Agrícolas, controlada por funcionarios escogidos políticamente por el gobernador republicano Pete Wilson, emitió una queja en contra de los rancheros que ilegalmente tomaron venganza en contra de los trabajadores después de efectuarse su elección. El rancho VCNM resolvió la disputa legal y accedio a pagar a sus trabajadores $113,000.00 en salarios caídos. Para ese entonces, el rancho VCNM se convirtió en el quinto rancho que cerró sus operaciones después de que los campesinos votaran por la Unión de Campesinos.
La Unión de Campesinos cita esta historia de venganza cuando se dirige a los lideres de la industria de la fresa como Driscoll para que accedan a mantenerse neutrales cuando sus los trabajadores empleados por los rancheros se esten preparando para organizarse para la elección del sindicato.